Damon S. Feltman, un reconocido estratega, líder y experto en misiones espaciales, estuvo en las oficinas de Forbes Ecuador. Cuenta con una sólida experiencia en el Departamento de Defensa de EE.UU. y visitó Ecuador gracias a la gestión que está realizando la Universidad Hemisferios y el Instituto de Ciencias Espaciales MILO. Feltman visitó Ecuador como ciudadano, no como representante de ninguna institución de EE.UU. Su objetivo fue compartir su conocimiento para impulsar el crecimiento de la participación de Ecuador en la economía espacial.
¿En qué consiste la economía espacial?
Yo diría que la economía espacial no es algo nuevo, al menos en EE.UU. y en otros lugares del mundo. Durante mucho tiempo han existido actividades espaciales comerciales. Sin embargo, en los últimos años han surgido varias tendencias que permitieron que esta comercialización se abra y cree nuevos mercados. Un ejemplo son los lanzamientos de cohetes, que pasaron de ser muy costosos y de un solo uso, a ser reutilizados y más económicos. Muchas compañías están buscando la reutilización de su tecnología y el costo de poner algo en órbita ha disminuido drásticamente. Así han aparecido nuevas aplicaciones y sobre todo desarrollado nuevos mercados. Entonces, cuando escuchas el término de economía espacial, se refiere a este crecimiento de la comercialización de algo que solía pertenecer principalmente a los gobiernos y ahora es más accesible.
¿Cómo Ecuador puede impulsar esta economía en sus políticas públicas?
Yo impulsaría la educación STEM en los primeros niveles educativos. Y, en segundo lugar, considero que programas como la asociación de la Universidad Hemisferios con el Instituto MILO de la Universidad Estatal de Arizona, son oportunidades para ayudar a que las nuevas generaciones participen en esta economía. Ahora pueden hacerlo de una manera que no existía hace 30 años.
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¿Cómo se podría aplicar esta economía en Ecuador?
A medida que más y más capacidades se desarrollen en el espacio y surjan más cosas como la fabricación de tecnologías espaciales; los programas universitarios pueden capacitar a su futura fuerza laboral para descubrir las mejores aplicaciones en su territorio. Un estudio del Foro Económico Mundial de este año describe muchas oportunidades de crecimiento en otros mercados como: la agricultura, las cadenas de suministro, el transporte, los servicios profesionales de salud… Cosas que no se asocian necesariamente con el espacio se beneficiarán mucho.
¿Cómo puede la economía espacial solucionar problemas actuales como el cambio climático?
Hablaré específicamente sobre el monitoreo ambiental. Hemos tenido esto durante muchos años, pero los datos no eran lo suficientemente granulares y carecían de cierta frescura. Para tomar una foto de un lugar determinado, los datos no se recolectaban de manera oportuna. Ahora, a través de lo que está ocurriendo con el Instituto MILO y la Universidad Hemisferios, existirá acceso a mayores volúmenes de imágenes satelitales comerciales. Los estudiantes aprenderán a monitorear el ambiente de manera práctica y descubrirán qué es importante en su país. Por ejemplo, monitorear actividades ilegales de tala o minería en el Amazonas o quizás la pesca ilegal cerca de las Islas Galápagos. Estas son habilidades que se desarrollarán con el acceso a los datos, combinado con las oportunidades de formación en las universidades.
¿Cuál es el rol de las universidades o de las escuelas en este contexto?
Es importante que los niños, desde una edad temprana, conozcan que tienen un lugar en esta economía. Históricamente, el espacio ha sido una actividad solo de países grandes y ricos como: Estados Unidos, Europa o quizás Rusia. Ahora las oportunidades son más abiertas para otras naciones. Nosotros debemos ayudar a las generaciones más jóvenes a entender que hay un lugar para ellos.
¿Cómo Ecuador puede captar recursos que mueve esta economía a nivel mundial?
Como estadounidense, no quiero proyectar lo que creo que Ecuador debería hacer. Yo estoy aquí tratando de explicar que hay una oportunidad y no se debe desechar. Ustedes tienen la capacidad de encontrar su lugar y participar.
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¿Qué necesitamos para ser un puerto espacial de lanzamiento de cohetes? ¿Qué tan factible o real es?
Depende de las metas y los objetivos de su nación. Lo que diría es que podrían comenzar con vuelos de investigación suborbital. Los cohetes de sondeo son una manera muy fácil de entrar en la capacidad de lanzamiento. Si vemos la ubicación de Ecuador, en el borde del Pacífico de América del Sur, tiene un gran potencial porque es una trayectoria muy importante para los vuelos espaciales. Incluso si visualizan un futuro donde cohetes realizan entregas de carga, de punto a punto, a través del espacio, es posible que Ecuador sea un lugar de aterrizaje, para recibir estas mercancias. Talvez no puedan lanzar cohetes per se, pero las oportunidades son muchas.
¿Necesitamos mucho dinero?
Cuando las personas escuchan el término "puerto de lanzamiento" piensan en algo muy grande como Cabo Cañaveral o la Guayana Francesa, donde los europeos tienen su sitio de lanzamiento. Ciertamente, podría crecer hasta ese nivel, pero creo que Ecuador debería aspirar a lo que necesita y lo que puede sostener. No creo que tenga que ser tan grandioso al principio. Pero, con el tiempo, a medida que estos mercados y tecnologías se desarrollen, es posible que pueda convertirse en un puerto espacial importante en la costa sudamericana. Por ejemplo, naciones como Escocia o Nueva Zelanda están construyendo sus propios puertos de lanzamiento. Lo hicieron con el tiempo y están construyendo sus propias capacidades.
¿Qué podemos aprender de países como EE.UU. que están más avanzados?
Las asociaciones son un habilitador clave para construir una economía espacial. Si Ecuador persiguiera una estrategia espacial a nivel nacional que especificara sus objetivos, permitiría que organizaciones como las universidades se acerquen a sus pares de países más avanzados y compartan objetivos comunes. Además, de introducir la oportunidad de tener conversaciones comerciales. Si una empresa quisiera ampliar su base de fabricación podría mirar a Ecuador para una asociación.
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¿Cuáles son sus expectativas con el Instituto MILO?
No estoy directamente afiliado con MILO, aunque es de la misma universidad a la que asistí. Así que estoy familiarizado por esa vía. Diría que esta asociación con la Universidad Hemisferios será fundamental para el desarrollo de un programa de ingeniería, para mejorar su capacidad de monitoreo ambiental doméstico, para mejorar su capacidad de procesamiento de datos y también su capacidad de ingeniería de datos, que será fundamental para la economía espacial. Además, ayudando a las generaciones más jóvenes a construir un conocimiento STEM, podría motivar a que un potencial socio de Ecuador realice una contribución significativa. Su país ya hizo un gran avance al suscribir los Acuerdos de Artemisa, orientados a la exploración espacial civil sostenible.
¿Qué podremos encontrar en un futuro?
En una visión a 10 o 20 años vamos a ver mucha actividad en el espacio. Además, vamos a ver avances en la tecnología de cohetes que permitan una entrega más eficiente de mercancías. Será una realidad llevar y traer cosas del espacio para entregarlas alrededor del mundo. También, existirá mayor influencia de estas tecnologías en otras industrias como las cadenas de suministro y la agricultura. Ustedes, como una nación agrícola, pueden aprovechar la tecnología espacial para avanzar en su capacidad de producir alimentos para su gente y para el mundo. (I)