El hijo del cofundador de Apple, Steve Jobs, Reed Jobs, anunció la creación de una empresa de capital riesgo para financiar nuevos tratamientos contra el cáncer, la enfermedad que truncó la vida de su padre, que ya ha recaudado 200 millones de dólares de inversores como el multimillonario capitalista John Doerr, el Memorial Sloan Kettering Cancer Center, la Universidad Rockefeller y el M.I.T.
La empresa, llamada Yosemite, es una rama de Emerson Collective, una empresa híbrida de inversión, impacto social y filantropía fundada en 2004 por la esposa del difunto Steve Jobs, Laurene Powell Jobs.
Yosemite debe su nombre al Parque Nacional de Yosemite, donde Steve y Laurene se casaron, según el New York Times.
Yosemite gestionará un negocio con ánimo de lucro, pero también mantendrá un fondo asesorado por donantes con la esperanza de que, una vez que un proyecto tenga éxito, se convierta en benefactor de otras ideas prometedoras, informó el Times.
"Nunca había querido ser un inversor de capital riesgo", dijo Reed Jobs al Dealbook del New York Times. "Pero me di cuenta de que cuando estás incubando algo y poniéndolo en marcha, puedes hacer una diferencia tremenda en qué activos forman parte de ello, qué dirección va a tomar y cuál va a ser el enfoque científico".
El patrimonio neto de Powell Jobs asciende a 14.300 millones de dólares según la última valoración de Forbes.
Antecedentes
Laurene Powell Jobs fundó Emerson Collective en 2004 y destinó a la empresa gran parte de los miles de millones de dólares en acciones de Apple y Disney que heredó de su difunto marido, después de que éste falleciera en 2011 de cáncer de páncreas a los 56 años. Reed Jobs es el director general de salud de Emerson Collective tras abandonar la carrera de Medicina, donde estudiaba para convertirse en oncólogo.