Durante tres años, desde las ventanas de transferencia de 2019 a 2021, se cree que la Juventus ingresó US$ 319 millones resultado de haber inflado los precios durante ese tiempo.
El traspaso más seguido fue el de Miralen Pjanic del equipo italiano al Barcelona en junio de 2020. Un acuerdo valorado en US$ 67,9 millones, un intercambio directo por el centrocampista brasileño del equipo español, Arthur Melo.
Estos eran trucos contables para equilibrar las cuentas a mitad del ejercicio. Pjanic, que tenía 30 años en el momento de la operación, no era en absoluto un jugador de 60 millones de euros, teniendo en cuenta que su estado de forma había bajado sustancialmente en sus dos últimos años en la Juventus.
Otros acuerdos sospechosos incluyen a Emil Audero, que se unió a la Sampdoria por US$ 22 millones a pesar de haber jugado sólo un partido con el club, en la última jornada de la temporada 2016-17. Sin embargo, la Juventus no es el único equipo investigado, ya que el Nápoles también está siendo examinado por el traspaso de Victor Osimhen desde el Lille en el verano de 2020.
Las finanzas del club italiano
La noticia de que el equipo italiano está bajo el microscopio financiero no debería ser una novedad para cualquiera que preste atención al estado de sus finanzas en los últimos años. Es revelador que muchos de estos acuerdos se produjeron tras el pase de Cristiano Ronaldo.
El contrato de cuatro años de Ronaldo con el club, con un salario de 36 millones de dólares por temporada, fue siempre una enorme carga para el club, incluso antes de la pandemia.
El fichaje de Ronaldo, y el compromiso con su descomunal salario, acaparó tantos ingresos del club que este no pudo permitirse el lujo de fichar a otros jugadores y rejuvenecer zonas del plantel. Incluso con la mejora de los acuerdos comerciales que se firmaron con Jeep y Adidas como consecuencia del fichaje de Ronaldo, además de los ingresos casi máximos del club por los partidos, que se estancaron en torno a los US$ 73 millones, la Juventus simplemente no generó suficiente dinero para seguir el ritmo de otros pesos pesados europeos.
Además, la disminución de los contratos de derechos de televisión nacionales y extranjeros de la Serie A no hizo sino agravar el problema. Todos los recursos habituales se habían agotado, por lo que la dependencia de la plusvalía se hizo absolutamente necesaria.
No sólo el acuerdo con Ronaldo fue la causa de los problemas actuales de la Juventus. Jugadores como Aaron Ramsey y Adrien Rabiot fueron presentados con contratos monstruosos en el verano antes de que el Covid-19 remodelara el mundo para atraerlos a Turín.
Estos dos acuerdos, quizás por encima de todos los demás, ponen de manifiesto la pura obscenidad de los tres años de Fabio Paratici como director deportivo. Se podría argumentar que Ronaldo al menos garantizaba goles y aportaba una mayor proyección internacional al club. Ramsey y Rabiot no aportaron nada de eso, y el primero apenas ha dado una patada al balón con la Juventus en el año natural 2021.
Si se la declara culpable, la Juve podría recibir una fuerte multa o una deducción de puntos. El presidente Andrea Agnelli, el vicepresidente Pavel Nedved y Paratici también están siendo investigados, pero el problema de estos casos es tratar de demostrar definitivamente cuál es el valor real de un jugador.
Un club puede valorar a un jugador en US$ 28 millones, mientras que otro podría valorarlo en US$ 16,9 millones. ¿Quién va a deliberar sobre quién tiene razón o no en última instancia? Es un tema complejo, pero el hecho de que la Juventus esté siendo investigada no debería sorprender a nadie.
Paulo Dybala logra un contrato millonario
El argentino Paulo Dybala, de 27 años, que actualmente juega en la Juventus de Italia, tiene todo arreglado para firmar un contrato que lo ligará a la institución durante cinco años más y le generará un ingreso anual de varios millones de dólares.
Las negociaciones se extendieron más de lo esperado pero todo se encamina entre el agente del jugador y los directivos. Si bien el club y los representantes del cordobés están ultimando detalles, ya trascendió que el monto anual que cobrará La Joya superará los US$ 10 millones al año. Además, contará con la posibilidad de acceder a bonos de hasta US$ 4 millones más en relación a los goles y al logro de campeonatos con la Juventus.
De todas formas, la base está acordada y lo que resta definir son precisamente esos montos extra. Por otro lado, quienes se encargan de manejar la carrera de Dybala también estarían pidiendo que las cifras aumenten con los años pero, de no lograrlo, eso no sería un inconveniente para no firmar el nuevo contrato.
Por otro lado, la Juventus también aumentaría el valor de mercado del cordobés para evitar una futura compra de otro club. Actualmente, ese valor está fijado en US$ 55 millones y se espera que pase a US$ 70 millones.
De no surgir ningún inconveniente por las negociaciones, la intención de ambas partes es firmar el contrato antes que finalice noviembre para concluir el año con el fichaje y arrancar el 2022 con la certeza de que La Joya seguirá en la Juventus, que actualmente cuenta con Massimiliano Allegri como entrenador.
*Con información de Forbes US.