Google ha detallado una nueva tecnología para smartphones que podría situar a los Google Pixel de la compañía un paso por delante de los iPhone y los Samsung Galaxy.
La tecnología, revelada en una reciente solicitud de patente, describe una nueva cámara frontal bajo la pantalla que permitiría a la empresa eliminar por completo la muesca o, como le gusta llamarla a Apple, la "isla dinámica" de la pantalla. Esto daría lugar a una experiencia de pantalla completa ininterrumpida para los usuarios, haciendo el máximo uso del espacio disponible.
Un diseño de este tipo presenta algunos problemas notoriamente difíciles, ya que la pantalla debe funcionar como pantalla y como "ventana" para permitir el paso de la luz a la cámara frontal situada debajo. Además, debe desempeñar ambas funciones sin afectar negativamente a la calidad de la pantalla ni de la cámara.
Las cámaras bajo la pantalla ya existen en smartphones como la gama Samsung Galaxy Z Fold, pero la solución de Google es única por la forma en que pretende maximizar la calidad de la cámara introduciendo deliberadamente elementos que bloquean la luz y distorsiones.
La técnica de Google utiliza dos regiones especializadas de la pantalla que bloquean o distorsionan la luz de diferentes maneras a medida que atraviesa la pantalla. Esto podría lograrse utilizando una capa de material de bloqueo de la luz que inserte diferentes formas o patrones entre la pantalla y un par de sensores de cámara, uno debajo de cada región especializada. Los sensores también podrían ser de distintos tipos, por ejemplo, uno en color y otro monocromo.
Cada patrón de bloqueo de la luz se adapta a su sensor para ofrecer la mejor calidad posible en una característica concreta, como la nitidez, mientras que el otro se ajusta para obtener mejores resultados en otra característica, como la fidelidad del color. Cada una de estas regiones de la pantalla también podría presentar distribuciones de píxeles alternativas que afecten al recorrido de la luz a través de la pantalla de formas diferentes.
Los resultados de cada sensor se combinan para crear una imagen final de alta calidad mediante procesamiento digital de imágenes y aprendizaje automático. De este modo, se reduce el impacto negativo de disparar a través de una pantalla.
Google no será el primero en fabricar una pantalla de este tipo, pero los intentos anteriores han fracasado hasta ahora en cuanto a la calidad, ya que la mayoría de los teléfonos de gama alta siguen con la actual tecnología de pantalla "con muesca" en lugar de obligar a los usuarios a soportar selfies de calidad inferior o zonas obvias de baja calidad en la pantalla.
Por supuesto, al tratarse de una mera solicitud de patente, no hay garantía de que Google vaya a producir una cámara de este tipo en un futuro próximo, pero desde luego hay demanda para ello, y si la nueva tecnología de Google puede ofrecer resultados de alta calidad, entonces podría convertirse en una razón de peso para considerar un futuro dispositivo Pixel frente a un iPhone o un smartphone Galaxy.