La industria del lujo está experimentando una gran transformación tecnológica en una época marcada por la experiencia del cliente. Tendencias como la inteligencia artificial, la realidad virtual y aumentada, blockchain, Web3 e Internet de las Cosas (IoT) son parte de la nueva convergencia entre tecnología y lujo, tanto para mejorar la producción y distribución como para crear itinerarios de compra más atractivos. 

La evolución del comercio electrónico supone también un gran cambio en la forma en que los consumidores de alto valor compran y experimentan los productos y servicios de lujo en la actualidad. Este perfil de compradores priorizan la última tecnología y, en función de ésta, tienen un 45% más de probabilidades que el consumidor promedio de comprar nuevos productos tecnológicos tan pronto como estén disponibles.

De acuerdo con Statista, se espera que el mercado mundial de artículos de lujo aumente de 354.800 millones de dólares en 2023 a 418.900 millones de dólares en 2028, a un ritmo anual del 3,4% con un acento marcado en los comportamientos de compra de millennials y la Generación Z sumado a la fortaleza constante del canal online.

La Phygital Experience

La consecuencia lógica de contar con nuevos itinerarios de compra digitales cada vez más predominantes en el sector es el crecimiento de los canales de venta online. En el nuevo viaje del cliente, en el que comienzan a desaparecer las líneas separadoras entre mundo físico y digital, factores como la exclusividad -que siempre han sido característicos del sector del lujo- ahora se acentúan a través de nuevos enfoques basados en la hiperpersonalización digital y la mezcla del mundo digital y físico que conocemos como Phygital Experience.

Por ejemplo, el Live Shopping, también conocido como Live Commerce o Live Streaming, se está convirtiendo en un elemento indispensable para cualquier firma que opere en el sector del lujo a nivel global y que busque atraer a esta generación. En China ya es tendencia, y muchas marcas promocionan y venden sus productos a través de interacciones en tiempo real en diversas plataformas y en colaboración con influencers.

En este contexto, abordar la innovación tecnológica de manera estratégica es esencial para mantenerse competitivos y satisfacer las demandas cambiantes de los consumidores tan exigentes que caracterizan al sector del lujo, adaptando lo que la tecnología tiene para aportar en cada caso.

A su vez, aprovechar los avances que se están alcanzando en el ámbito de la automatización permite mejorar significativamente la eficiencia en los procesos de producción y comercialización. Las grandes firmas están aumentando su inversión en sistemas tecnológicos avanzados que permitan llegar a niveles de excelencia operativa, prestando un servicio realmente diferenciado a los clientes, y cada vez más superando los estándares de la industria.

Resulta esencial capacitar al personal para que puedan trabajar de la mano de estas nuevas tecnologías e infraestructura. La consecuencia es la apertura de un campo muy amplio para la formación, la capacitación y la actualización de habilidades y conocimientos entre los profesionales del sector.

Experiencia única y personalizadas

La personalización de productos es otra de las tendencias más importantes para el sector del lujo en el momento actual. Las organizaciones invierten en soluciones tecnológicas que permitan contribuir al diseño de sus productos y experiencias de marca únicas, una de las características distintivas del comprador de esta categoría.

Esto incluye la inversión en herramientas de integración de datos para comprender mejor las preferencias de los clientes, su viaje a través de la marca y anticipar sus deseos y preferencias. Este diferencial, sumado a la atención personalizada y la interacción continua, son fundamentales para cultivar relaciones sólidas y leales, y por eso también se observa cada vez mayor integración entre los equipamientos tecnológicos digitales y la atención presencial en tienda. 

En este sentido, ¿cuál es el aporte clave de la inteligencia artificial? Actualmente es un aliado poderoso para comprender el comportamiento del cliente y tomar decisiones basadas en datos. “Invertir en sistemas avanzados de análisis de datos y algoritmos de aprendizaje automático permite a las marcas obtener una visión profunda de las preferencias del cliente, así como hacer más eficientes los procesos operativos de gestión de inventarios y planificación de la demanda.

Transparencia y trazabilidad

Adicionalmente, blockchain es un protagonista tecnológico central que llegó para respaldar la transparencia y la trazabilidad en toda la cadena de suministro, un aspecto cada vez más importante para los consumidores preocupados por la sostenibilidad, que abundan en la categoría de lujo. 

Las firmas de lujo están explorando cómo pueden utilizar blockchain para autenticar productos, rastrear ingredientes y demostrar su compromiso con las prácticas responsables. Esto no solo fortalece la reputación de la marca, sino que también impulsará la confianza del consumidor. Además, la experimentación con nuevos procesos de fabricación eficientes ofrece oportunidades para aumentar la flexibilidad y la personalización en la producción de productos de lujo.

Esta tendencia está llevando a muchas marcas del lujo a considerar la impresión 3D como herramienta para mejorar el diseño y la fabricación de productos exclusivos y personalizados, a la vez que se reducen los desperdicios y se aumenta la eficiencia energética.

Es imprescindible alinear la estrategia tecnológica con la visión y los valores de la marca, manteniendo siempre un enfoque en la excelencia y la satisfacción del cliente y atendiendo las características tan particulares de un sector como el lujo, donde el nivel de exigencia y calidad esperada es muy superior a otros. Las marcas deberían alejarse paulatinamente de los enfoques tradicionales que han dominado la industria del lujo y mantenerse en estado de cambio, al tanto de lo que sucede en el ámbito de las tecnologías emergentes en pos de mejorar la calidad, la personalización y la sostenibilidad de los productos de lujo, así como para enriquecer las experiencias de los clientes.