En la era de los nómadas digitales, cualquier lugar es bueno para pasar una jornada de trabajo aislado. Y las cabinas de aviones reciclados como oficinas, o bien cabañas glamping, son una nueva opción de esta startup que ha encontrado una alternativa viable y comercial de vivienda.
Los aviones reciclados convertidos en cabañas o simples oficinas son el foco de esta nueva empresa del noroeste de Irlanda que los está transformando para llevar el trabajo a casa desde una nueva perspectiva.
La idea comenzó como un proyecto personal de transformar aviones reciclados en hogares para el constructor Kevin Regan, quien de acuerdo a un informe periodístico, cuando su cuñada publicó fotos de su nueva oficina en casa, terminaron recibiendo un aluvión de solicitudes de extraños.
Así que Regan decidió tomar más en serio la iniciativa de transformar sectores de cabinas de viejos aviones para ser reciclados, llamó a su socio comercial Shane Thornton y juntos lanzaron Aeropods.
La idea cerró justo, ya que los aviones reciclados son altamente resistentes, gracias a sus fuertes aleaciones de aluminio y sus paredes totalmente aisladas, por lo que, sus piezas son perfectas para fabricar muebles duraderos y también oficinas.
En este sentido, la idea ha sido muy viable, ya que los aviones se dan de baja con frecuencia, y con 15.000 unidades aéreas listas para retirarse en las próximas dos décadas, al menos en ese sector de Europa, Aeropods contará con una gran cantidad de materiales con los que trabajar.}
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Pero lo más interesante es que las cápsulas hechas con parte de aviones reciclados pueden costar entre 22.000 y 41.000 dólares, dependiendo de qué tan elegante quiera el cliente que sean las suyas.
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El primer proyecto de la empresa involucró a un Airbus A320 de la extinta aerolínea IndiGo del aeropuerto de Cardiff en Gales, añade el informe y desde entonces, Aeropods ha recibido solicitudes para construir diversos tipos de 'vivienda'. Entre ellas, se destaca una oficina dos en uno y una sala de juegos para niños, una sala de estar adicional, cápsulas glamping, salas de reuniones, bares, unidades de punto de venta y estacionamientos para bicicletas.
Cabe decir que éste ha sido un boom para la nueva empresa, que solo ha invertido 110 dólares en publicidad hasta el momento, sumado a que los materiales de construcción provienen de elementos reciclados, los costos se han mantenido bajo y el negocio en ascenso.
Aquellas cápsulas hechas a medida todavía tienen sus persianas aéreas originales que se bajan para dar sombra, aunque las cabinas de almacenamiento superiores no están intactas: “todo, incluido el piso, es del avión original”, señala Regan.
Por otra parte, las puertas de vidrio del A320 también tienen doble acristalamiento y están aisladas para mantener cómodo al ocupante durante todo el año, algo que si se tiene en cuenta que los nuevos Aeropods son portátiles, gracias a un sistema de elevación incorporado, permite al propietario mudarse de lugar fácilmente.
En la misma línea, los emprendedores sostuvieron que el mantenimiento de los Aeropods de aviones reciclados es tan bajo que se compara con la que implica mantener un automóvil nuevo, ya que “solo se requiere limpiar y lavar".
Si bien la iniciativa solo funciona en Irlanda, con el tiempo, Aeropods espera expandirse a Inglaterra, aunque ya está abriendo a solicitudes de cualquier parte del mundo.
*Con información de Forbes México.
