Las compañías de Internet de China están compitiendo para desarrollar sus propias versiones de los servicios de estilo ChatGPT en medio del frenesí global en torno al chatbot conversacional de IA, pero surgen dudas sobre si pueden replicar el éxito de su rival estadounidense.
Al menos cinco empresas tecnológicas, desde el gigante del comercio electrónico Alibaba de Jack Ma hasta el operador de motores de búsqueda Baidu de Robin Li, anunciaron en los últimos días que están trabajando en una herramienta similar a ChatGPT.
Un portavoz de Alibaba, por ejemplo, confirmó el miércoles por la mañana que la compañía ahora está realizando pruebas internas en un bot de estilo ChatGPT, mientras que Baidu dijo hace tres días que está en camino de lanzar oficialmente lo que llama Ernie Bot en marzo.
El boom de ChatGPT
Los detalles de los nuevos servicios no se conocieron de inmediato, pero lo que está claro es que estas empresas están capitalizando el repentino interés por las tecnologías de inteligencia artificial conversacional. Desarrollado por OpenAI, con sede en San Francisco, se espera que ChatGPT revolucione las búsquedas en Internet al ofrecer información a los usuarios a través de conversaciones similares a las de los humanos.
Pero la herramienta innovadora, que permitió a OpenAI obtener una inversión de US$ 10 mil millones de Microsoft el mes pasado y se incorporará al motor de búsqueda Bing del gigante tecnológico, aún no está disponible en China. Los comerciantes de la plataforma Taobao de Alibaba vendían servicios que ayudan a las personas a registrar cuentas OpenAI por menos de cinco yuanes (0,74 dólares) cada una, y un proveedor vendió más de 80 de esas cuentas en el último mes, según muestra una búsqueda en Taobao.
Sin embargo, desarrollar una versión china puede generar complicaciones legales, según Ke Yan, jefe de investigación de DZT Research, con sede en Singapur. Las leyes en China continental siguen siendo "bastante ambiguas" en lo que respecta a la protección de datos y privacidad, lo que podría generar preguntas sobre qué información se puede aprovechar para entrenar el algoritmo, o cómo los bots usan datos de fuentes protegidas por derechos de autor para responder a las preguntas de los usuarios.
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“En China, es posible que aún no se hayan establecido los límites finales de la ley”, dice Ke.
Y Shen Meng, director gerente del banco boutique de inversiones Chanson & Co., con sede en Beijing, advierte que los proyectos estilo ChatGPT probablemente no se traducirán en ganancias de ingresos en el corto plazo. “Las compañías chinas de Internet solo están siguiendo el boom después de que otras lo hicieron primero y se convirtieron en una sensación”, dice. “Pero la IA es una tecnología clave que requiere una inversión a largo plazo… y esta tecnología subyacente no generará cambios materiales en el desempeño comercial muy rápidamente”.
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La atención de los inversores
Sin embargo, los inversionistas en China continental no se desaniman y continúan persiguiendo acciones de varias compañías relacionadas con la IA, incluida 360 Security Technology, del multimillonario Zhou Hongyi, que cotiza en Shanghái y también está trabajando en un bot de estilo ChatGPT.
Los inversores internacionales, por otro lado, parecen estar reduciendo sus expectativas. Las acciones de Baidu cayeron hasta un 6,3% en Hong Kong el jueves, extendiendo la caída de casi el 5% de ayer, ya que el repunte inicial sobre su proyecto de chatbot parece estar perdiendo impulso.
La caída puede deberse en parte a la falla de Google. En su aparente prisa por defender su dominio en las búsquedas, el gigante tecnológico de Estados Unidos sin darse cuenta destacó las dificultades de poner las tecnologías de chatbot en uso en el mundo real cuando su bot Bard proporcionó información inexacta al responder preguntas durante un video de demostración.
El error provocó que el precio de las acciones de la empresa matriz Alphabet cayera un 7%, lo que eliminó US$ 100 mil millones de su valor de mercado.
Y al menos una empresa china ya está reconociendo los desafíos que se avecinan. En respuesta a la consulta de un inversionista, 360 Security Technology dijo que existe una "brecha importante" entre su inversión y su destreza tecnológica en comparación con la última versión de ChatGPT.
*Con información en Forbes US.
