A partir de este miércoles, todos pueden descargar la aplicación de chat de audio, lo que marca un nuevo capítulo importante para la startup de un año, ya que se enfrenta a las altas expectativas que le imponen los inversores y los usuarios de alto perfil.
"Son tantas las cosas buenas que surgen de la conversación, y queríamos que hubiera más en el mundo", escriben los cofundadores de Clubhouse, Paul Davison y Rohan Seth, en una nueva publicación de blog.
“Pudimos hacer crecer Clubhouse de manera mesurada y (en su mayoría) evitar que las cosas se rompan a medida que escalamos. Pero siempre hemos querido que Clubhouse estuviera abierto".
Clubhouse se lanzó en marzo de 2020 como una aplicación solo por invitación, pero no obstante se convirtió en un éxito de la noche a la mañana entre la élite de Silicon Valley, ofreciéndoles un lugar exclusivo para reunirse durante la pandemia.
La historia reciente de un boom
Un mes después, tenía 5.000 usuarios y una valoración de 100 millones de dólares gracias a Andreessen Horowitz. Un año después, su valoración había aumentado a 4.000 millones de dólares, según datos de PitchBook, y la aplicación se había convertido en el lugar para ser escuchado, atrayendo a celebridades como Drake y Oprah y luminarias empresariales como Mark Cuban e incluso a su competidor Mark Zuckerberg.
A pesar de limitar el acceso, la aplicación se descargó más de 20 millones de veces desde su debut: en los últimos dos meses, la mitad provienen de usuarios de Android, según nuevas cifras publicadas por la compañía el miércoles y datos de Sensor Tower.
Los usuarios están creando diariamente 500.000 salas públicas y privadas, lugares en la aplicación para albergar las conversaciones de audio, un aumento de casi el 70% desde mayo. A la gente parece gustarle lo que escucha: el usuario medio de Clubhouse pasa más de una hora al día en la plataforma. Se enviaron unos 90 millones de mensajes directos a través de la aplicación desde que la compañía lanzó la función la semana pasada.
Un horizonte no tan claro
Si bien Clubhouse demostró ser un éxito durante la pandemia, enfrenta un futuro incierto. El mundo está volviendo a sus patrones sociales normales: salir de casa, ver a la gente cara a cara. Cuando esos muchos tipos de interacciones eran imposibles o imprudentes durante los cierres de Covid-19, Clubhouse ofreció un reemplazo para ellos. Queda por ver si los usuarios se acercarán al sitio con el mismo entusiasmo ahora que esas interacciones son posibles nuevamente.
Tampoco está claro en qué quiere convertirse exactamente Clubhouse. ¿Un lugar para lo que son esencialmente podcasts en vivo? ¿Un camino hacia las conferencias virtuales? Parece más probable alguna combinación de los dos.
Clubhouse también está trazando un camino hacia la monetización. Parece estar listo para seguir el ejemplo de otras redes sociales y eventualmente comenzar a tomar una parte de los ingresos que los usuarios populares generan de la plataforma a través de conversaciones con boletos y consejos digitales. Abrir de par en par las puertas al público en general permitiría, en teoría, que estas audiencias (y flujos de ingresos) crecieran enormemente.
Y aunque Clubhouse es líder en la categoría naciente de redes sociales de audio, está lejos de ser el único. Twitter lanzó rápidamente una función competitiva en su aplicación. Según los informes, Facebook también está trabajando en una, al igual que Spotify.
Con información de Forbes US.