Forbes Ecuador
Guayaquil
Columnistas
Share

El liderazgo económico del Puerto Principal no se limita a su jurisdicción política, sino que representa el potencial productivo de una parte importante del Ecuador. Ofrecer las herramientas para explotar este potencial debe ser parte integral de la estrategia de crecimiento de Guayaquil para los próximos años.

12 Julio de 2023 12.18

La región de la cuenca del río Guayas, regada por sus numerosos afluyentes que nacen en la cordillera de los Andes, ganó importancia desde tiempos coloniales por sus frondosos bosques, que permitían la explotación de madera para construir barcos en lo que fue uno de los astilleros más importantes de la América española. 

Después vino la explotación de los frutos de la mezcla de tierra fértil y sol tropical, que se conjugan para formar una región con significante potencial de producción agrícola y que ha convertido al país en un exportador neto de alimentos, con productos capaces de entrar en los más exigentes mercados del planeta. Y Guayaquil es el puerto por el que sale al mundo toda esta producción, además la puerta de entrada a un mercado de millones de personas. Esto le da a la ciudad un puesto estelar en lo que es la creación de bienes y servicios para servir a una importante parte del país, cuya influencia se siente desde Santo Domingo hasta Loja, desde Manabí hasta Azuay.  

Teniendo esto en cuenta, creo relevante sugerir la consolidación de ciertos sectores económicos ya existentes, bajo una visión de largo plazo, lo cual permitiría aumentar el crecimiento de la ciudad y su zona de influencia.  

Referente del Cambio Climático: El crecimiento de la urbe ha sido desordenado, creando problemas debido a la falta de planificación urbana (temas conocidos como el caos vehicular y la inseguridad, que deben de ser arreglados inmediatamente), los cuales se agravan si pensamos que la ciudad y su zona de influencia están expuestas a las consecuencias del cambio climático y el fenómeno del Niño, como nos lo ha recordado el último invierno. Esto le da a Guayaquil la oportunidad de volverse un referente regional en cuanto a las inversiones para la prevención de los efectos del cambio climático en la región y una convivencia sana con la naturaleza alrededor, además de poder construir una marca – ciudad (un equivalente a marca - país, pero para Guayaquil) comprometida con el cuidado del medio ambiente. Ahora es el momento. 

Un puerto estratégico: Guayaquil es un centro logístico natural, con algunos puertos marítimos, un aeropuerto internacional y conexiones terrestres con todo el país y con el exterior. Darle al sector la importancia y visibilidad que se merece, trabajando en mejorar sus conexiones con el exterior e interior del país, integrándolo mejor con el funcionamiento de la ciudad, ayudarían a que Guayaquil pueda competir en mejores condiciones con otros puertos de la región y atraería fuertes inversiones. La logística debería de ser uno de los “sectores estratégicos” o “cluster” de Guayaquil. 

Un polo de atracción de divisas: La ciudad debería de enfocarse en la atracción de dólares del exterior, potenciando el hecho de que en su zona de influencia se producen los principales artículos de exportación no petrolera del país. De esta manera, está en el interés de los guayaquileños que su ciudad lidere en la provisión de bienes y servicios para toda la cadena productiva, los cual implica también fomentar el desarrollo de sectores como PYMES, importación de insumos y maquinaria, digitalización y financiamiento. Guayaquil debería estar pensando en consagrarse como el principal polo de atracción de divisas. 

Destino gastronómico: Una ubicación privilegiada, cercana al mar y al campo productivo, permite a sus habitantes tener acceso a mariscos y carnes a buenos precios, disponibles todo el año. Si sumamos a esto la tendencia a salir a comer de los guayaquileños, tenemos los ingredientes para iniciar una potenciación de la gastronomía como un distintivo de la ciudad. Ahondar esfuerzos en la capacitación y en el cumplimiento de las normas de higiene, sumados a certificaciones y la creación de una marca - ciudad ayudarían muchísimo a mejorar la vida de los tantos emprendedores gastronómicos de la ciudad. 

Centro de Medicina Regional: Guayaquil tiene, por el número de habitantes, un déficit hospitalario. Y si a esto le sumamos las personas en su zona de influencia, el déficit es aún mayor. También hay que tener en cuenta que cada vez hay más ciudadanos extranjeros buscando alternativas más económicas en países de Latinoamérica para ciertos tratamientos. Esto hace que las perspectivas para inversiones en el sector de la salud sean muy interesantes, por lo que posicionar a Guayaquil como un centro de medicina regional crearía grandes oportunidades. 

Símbolo de creatividad: Guayaquil es una ciudad con notables mercadólogos, creativos publicitarios, diseñadores gráficos y creadores de contenido digital, es decir, existe un gran potencial en la intersección entre los ámbitos digital, creativo y comercial. Este sector también produce y consume propuestas artísticas como teatro, artes plásticas y libros. Una ciudad culturalmente vibrante sería un símbolo de progreso.  

Muchas de estas iniciativas se pueden ejecutar a través de los brazos ejecutores del propio municipio, como la Dirección de Turismo y ÉPICO, mientras que otras implicarían mesas de trabajo con el sector privado. Lo importante es tener en cuenta que el liderazgo económico de Guayaquil no se limita a su jurisdicción política, sino que representa el potencial productivo de una parte importante del Ecuador. Ofrecer las herramientas para explotar este potencial debe ser parte integral de la estrategia de crecimiento de Guayaquil para los próximos años.   (O)

10