El entorno comunicacional evolucionó radicalmente con la pandemia y sigue cambiando. La aceleración tecnológica trajo consigo este 2021, cambios trascendentales en los procesos comunicativos por la presencia de nuevos consumidores y generadores de contenidos, cambios en el mercado y la aparición de otras plataformas de interacción social. 

Actualmente, la sociedad vive conectada e hiperconectada a dispositivos electrónicos, que la sumergen en un mar de información, que la Organización Mundial de la Salud (OMS), cataloga como 'Infodemia' y la considera riesgosa porque los contenidos provienen de fuentes no confiables.    

Es por eso, que este 2022 se presenta como el año del gran desafío para consolidar las nuevas estrategias comunicacionales, que permitan llegar de mejor manera a esos nuevos públicos o stakeholders, fortalecer la imagen y potenciar la reputación de las empresas, con contenido relevante, útil y de valor. Y para ello, se deben considerar los siguientes aspectos.   

Potenciar la comunicación en general:  
Las empresas que potencien sus acciones comunicacionales, tanto de forma externa como interna, offline como online, tendrán mayores posibilidades de alcanzar sus objetivos de negocios, fidelizar y conseguir nuevos consumidores, así como cohesionar a su plantilla interna. 

La comunicación debe ser mucho más colaborativa entre empleados, divisiones, departamentos o unidades de una misma organización. Debe estar centrada en los valores porque son el corazón y el motor que mueve a directivos y empleados, y es finalmente, la conexión con sus clientes.   

A nivel interno, la comunicación deber ser optimizada para facilitar la relación laboral, generar confianza y fluidez, para lograr el bienestar emocional de todos los colaboradores.  

La narrativa audiovisual y el storytelling serán elementos constantes en las estrategias de comunicación, para llegar a los diversos públicos objetivos, con el propósito de generar credibilidad y confianza.  

El relato empresarial será adaptado a los nuevos códigos y estilos de comunicación, en la era de la imagen, del entorno online y de la economía de la atención.  

El éxito de las acciones comunicativas y campañas corporativas dependerá de la integración estratégica del texto escrito, la persuasión y la emoción que se le impregne a los contenidos audiovisuales. 

Más empresas sostenibles:  
Las empresas deben volcarse mucho más por la sostenibilidad y la responsabilidad con el medio ambiente, porque los actuales consumidores muestran una desbordada preocupación por la salud. La sostenibilidad debe formar parte de la estrategia de las organizaciones.  

Un estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), de España, determinó que más del 70% de los consumidores españoles emplean criterios éticos y sostenibles al adquirir productos. Asimismo, un sondeo global, esta vez del Institute for Business Value, de IBM, señala que el 61% de los españoles está dispuesto a cambiar sus hábitos de compra con el propósito de reducir el impacto negativo en el planeta y un 48% pagaría más por marcas sostenibles o medioambientales responsables. 

Igualmente, el estudio de Dentsu & Microsoft indica que el 91% de las personas encuestadas quieren marcas que tomen decisiones alineadas al planeta y a la protección del medio ambiente.  

Estos nuevos patrones de consumo irrumpen cada vez y con más fuerza en la escena económica y social. Y, en este 2022 serán más evidentes, por lo que las empresas deberán tener un propósito auténtico, más allá de la responsabilidad social corporativa hasta llegar a la sostenibilidad como base de su modelo de negocio.    

Las empresas que quieran salir airosa, deberán tener clara esta propuesta, que tiene como reto comunicar esa innovación de manera eficaz, lo cual potenciará su reputación y su aceptación pública.  

Pasar de las historias a la acción: 
Este 2022, la comunicación de las empresas debe pasar del storytelling al storydoing; es decir, ir del saturado mercado de historias vacías a la acción. No solo deberán contar las historias que presenten a las organizaciones como únicas, que provocan emociones, que conquistan a sus públicos objetivos, sino que ahora deberán crear experiencias únicas en torno a sus productos o servicios. 

Deben volver real y tangible su discurso, lo cual permitirá que las marcas sean percibidas como confiables y con elementos diferenciadores. Comprenderán que los consumidores serán más que nunca protagonistas de su destino.     

Pasar de las historias a la acción significará mostrar los resultados de sus programas de sostenibilidad y responsabilidad social empresarial emprendidos para mejorar el entorno de su comunidad.  

Sigue el auge del podcast:  

El auge que experimentó el podcast en los últimos años continuará este 2022, por ser un formato o una plataforma de fácil acceso, gratuito, con una amplia variedad de géneros y la posibilidad de consumirlo en cualquier dispositivo móvil.  

Se potenciará su uso como canal de comunicación entre empresas y clientes. Pues, un estudio de Audio Digital 2021 de IAB Spain señala que un 61% de los internautas españoles, mayores de 16 años, consume contenidos de audio en formato digital.   

Asimismo, se considera que este formato de audio online revolucionó los hábitos de consumo de contenidos de los stakeholders, quienes demandan cada vez más mayor rapidez, inmediatez y comodidad.   

Expertos afirman que a través de este formato la publicidad es más cercana y menos intrusiva, ya que logra conectar con los valores de los potenciales clientes. Es ideal para el posicionamiento de una marca, a través de contenidos de entretenimiento o de información, todo en un mismo episodio de audio.   

El podcast es fácil de crear y de distribuir a bajo costo, ya que no requiere de equipos demasiados sofisticados, tanto así, que hasta un teléfono celular sirve para su producción y difusión. Su formato está alineado 100% con el estilo de vida actual, que está orientado al audio, y es un espacio ideal para conectar con partners e influencers.  
Las plataformas para su elaboración son cada vez más variadas, como Clubhouse, Spaces, Spotify, Telegram, WhatsApp, entre otras. 

Más videos cortos: 
El video corto y rápido continuará siendo el formato que predomine en el 2022 porque está destinado a entusiasmar e inspirar a sus usuarios. Por eso, plataformas como TikTok o Instagram tomarán mayor fuerza porque permiten crear ese tipo de contenidos, que se caracterizan también por la inmediatez. Ahorran tiempo, comunican mejor y con eficiencia. 

TikTok es una red social que reporta un mayor crecimiento y es una de las más usadas en la actualidad. En pocos años logró conseguir 1.000 millones de usuarios y se prevé que en los próximos doce meses supere en España a Facebook en facturación publicitaria. En Ecuador registra 3.76 millones de usuarios a octubre del 2021.  

En el año entrante seguirán las campañas en forma de challengers que generan comunidad, se probarán nuevas opciones de contenidos, se compartirá conocimiento, se crearán tendencias y se organizarán concursos globales con excelentes resultados.  

Este tipo de videos cortos de entre 6, 10 y 15 segundos, son inmersivos y generan la sensación de una conexión directa y personal. La comunicación visual genera más participación que la textual y depende mucho de su calidad y relevancia.   

Continúan las transmisiones en vivo:  
En el 2021 se agudizó el uso de las plataformas de streaming y las transmisiones en directo a través de las redes sociales, lo cual aumentará exponencialmente este 2022. 

Se integrarán los diversos eventos digitales, los podcasting y hasta las coberturas de medios. La clave seguirá siendo conseguir la mayor interacción con el público, creando una conexión entre el potencial cliente y el producto o servicio. 

Para que la transmisión en vivo cumpla su cometido, se deberá producir cuidadosamente el contenido del video, que debe ubicarse en el tiempo y en el espacio adecuado. 

Este tipo de transmisiones son muy positivas para las marcas, pues estudios establecen que el 90% de los potenciales clientes confían mucho más en la información audiovisual para decidir adquirir algún producto o servicio.  (O)