Alberto Einstein dijo esta frase “Solo aquellos que intentan lo absurdo logran lo imposible” y como en todas sus frases cuánta razón tenía.

Como ecuatorianos en general nos falta creer en nosotros mismos. Nos falta creer en ese absurdo; puede ser un sueño, una decisión, un error.  Esa falta de confianza sumado a otros factores macroeconómicos hace que nuestros vecinos, Perú y Colombia nos superen en algunos aspectos. 

No es que tengan mejores productos, o mejor servicio al cliente; pero sí saben venderse mucho mejor que nosotros. Saben sentir orgullo por lo propio y por sus raíces. 

Por suerte, tenemos hoy jóvenes emprendedores que sí han intentado ir un poco más allá de lo racional y existen ahora muchas más marcas de chocolate que están siendo consumidas a nivel nacional e internacional. De hecho, algunos de ellos fueron parte de algún reportaje de Forbes. 

Tenemos también empresas que han logrado salir de lo convencional y que ahora se han abierto camino como cadenas hoteleras nacionales, también la producción de café, y hasta la elaboración de vino y mezcal ecuatorianos por citar algunos ejemplos. Estos negocios parecían un absurdo en un inicio ya que nada de esto ha sido nuestro “core business”. Tenemos mucho más que ofrecer que banano, camarón, rosas y petróleo. Apostémosle a ser un mercado donde nuestros propios ciudadanos puedan ser profetas y quitémosle impacto al famoso refrán “Nadie es profeta en su propia Tierra” 

Depende de cómo juzguemos lo absurdo, sea esto en el buen o mal sentido tenemos algunos ejemplos de personas que han alcanzado lo imposible. Si hablamos de la justicia en nuestro país, hemos visto casos de personas en libertad por absurdo e imposible que parezcan. 

Ejemplos de esto puede ser el de Jorge Glass que pese a todo lo racional hoy goza de medidas cautelares autónomas, lo que le permite recuperar sus derechos constitucionales sin haber devuelto ni un solo dólar y esto evidencia que la justicia se aplica para quien puede comprarla y no para quien debe ser juzgado. Podemos citar también a la jueza de Montecristi, Gina Zambrano, que ordenó medidas cautelares a los femicidas en Cuenca pese a estar ya con una sentencia en firme. 

Lamentablemente lo absurdo e increíble de una historia pueden tener muchos más ejemplos si nos fijamos en la política y la justicia de Ecuador. No obstante, partiendo de ese mismo absurdo creo que aún podemos creer que nos esperan mejores días y que las historias pueden ser más positivas que irracionales. 

No perdamos nuestra capacidad de asombro y démosle la verdadera importancia y prestigio a las acciones positivas.

Me parece alucinante que Ecuador sea la portada de la prestigiosa Revista como National Geographic en donde en un suplemento de 50 páginas se promociona nuestra gastronomía, las culturas ancestrales y obviamente la belleza de las Islas Galápagos. 

Creo que si de verdad indagamos podemos encontrar a nuestro alrededor encontraremos historias que nos asombren, personas que nos inspiren y llegar nosotros también ser parte de aquellos que creen en lo absurdo y logran lo imposible. De hecho, creo que algunas de esas personas ya han sido parte de los reportajes de Forbes en donde han arriesgado mucho y ahora están en donde soñaron o quizás donde no lo hicieron porque eran sueños muy grandes. (O)