Forbes Ecuador
buena idea
Columnistas
Share

El emprendimiento es una cuestión de anticiparse en el tiempo, pero también de actitud y de contar con el ADN que tienen los entrepreneurs.

6 Junio de 2022 08.41

Año 2000. Cuenca. Un joven emprendedor ideó un sistema de delivery de comida (en ese entonces aún se le decía entrega a domicilio) a través de un sistema coordinado. El modelo era el siguiente: el emprendedor en mención se contactaba con restaurantes de la ciudad y les ofrecía el servicio de delivery. Los clientes llamaban a un número telefónico que no era del restaurante, hacían su pedido y el emprendedor contaba con dos o tres repartidores que iban al restaurante, recogían el pedido y lo entregaban al comprador.

Todo funcionaba mediante una llamada telefónica y la confianza que generaba este emprendimiento entre la gente. El restaurante hacía su venta y el emprendedor cobraba un porcentaje por la entrega a domicilio. En el año 2000 no había smartphones, ni aplicaciones, ni startups de delivery. La idea funcionó un par de años, pero no superó el valle de la muerte, ese espacio de tiempo tan temido por los emprendedores. Hoy estoy seguro de que si esa idea llegaba quizás una década después  este emprendedor cuencano sería la portada de muchas revistas de negocios, incluída Forbes.

Año 1998. Quito. Un estudiante de economía presentó un proyecto en una de sus clases: alquilar canchas de fútbol. Junto a un par de compañeros, este joven fanático del fútbol pensó que podía ser una buena idea adecuar un par de canchas y cobrar por su uso. Él había detectado una necesidad que no estaba siendo atendida.

La idea llegó a un grupo de profesores que dijeron que era un absurdo. “¿Quién va alquilar una cancha de fútbol?” fue la respuesta que recibieron los estudiantes universitarios. El proyecto quedó en un papel, nunca tuvo una oportunidad. Hoy, 24 años después, las canchas de fútbol de alquiler son un negocio consolidado y los clientes tienen que reservarlas con días de anticipación. ¿Qué pensarán hoy esos profesores?

Ideas como las mencionadas sirven para explicar que el emprendimiento es una cuestión de anticiparse en el tiempo, pero también de actitud y de contar con el ADN que tienen los entrepreneurs. Lo del tiempo puede ser relativo: en el ejemplo del emprendedor cuencano no contaba con la tecnología que ahora existe y que facilita tanto el crecimiento de los negocios.

En el caso de las canchas de alquiler quien tuvo la idea se lamenta de no haber insistido por su cuenta y montar el negocio, sin esperar la bendición de sus profesores. “Nos faltó eso que tienen los emprendedores y que les hace diferentes”. Se refiere a no tener miedo a arriesgar, dejando la zona de confort de la que pocos se atreven a salir.

Un empresario del mundo de los alimentos decía hace poco: “al emprender  hay que trabajar con pasión, con un propósito en mente que vaya más allá de las ventas y las utilidades”. Esa filosofía  permite que las buenas ideas se conviertan en buenos negocios. (O)

10