Pasando el sombrero nuevamente
La Facilidad de Resiliencia y Sostenibilidad (RSF, por sus siglas en inglés) ofrece financiamiento a largo plazo y a bajo costo para apoyar a los países en la implementación de reformas que mitiguen los riesgos para la estabilidad de la balanza de pagos, especialmente aquellos relacionados con el cambio climático y la preparación ante pandemias.

En mayo de 2024, el Directorio Ejecutivo del FMI aprobó un nuevo programa de Facilidad Extendida de Fondo (EFF, por sus siglas en inglés) para Ecuador, con una duración de 48 meses y acceso a un total de $4.000 millones, con un desembolso inmediato de $1.000 millones. Se espera que la primera revisión del EFF esté en marcha, lo que podría llevar a un desembolso adicional de $500 millones antes del 15 de noviembre. Según los datos disponibles hasta finales de agosto de 2024, es probable que se hayan cumplido todos los criterios cuantitativos de desempeño y todos los indicadores, salvo uno: el saldo de los atrasos presupuestarios con el sector privado nacional, que tenía un límite de $862 millones, alcanzó los $1.600 millones en julio (últimos datos disponibles).

Ecuador es elegible para acceder a un nuevo financiamiento del FMI bajo el Fondo de Resiliencia y Sostenibilidad, y las autoridades están explorando esta opción, según informó una portavoz del Fondo durante una rueda de prensa. La Facilidad de Resiliencia y Sostenibilidad (RSF, por sus siglas en inglés) ofrece financiamiento a largo plazo y a bajo costo para apoyar a los países en la implementación de reformas que mitiguen los riesgos para la estabilidad de la balanza de pagos, especialmente aquellos relacionados con el cambio climático y la preparación ante pandemias. La duración de la RSF coincidiría con la del programa EFF, que expirará en mayo de 2028, y Ecuador podría acceder a un límite acumulado de hasta el 150% de su cuota en el FMI. Con una cuota de 697.7 millones de DEG, el monto máximo disponible bajo la RSF sería de aproximadamente $1.4 00 millones, con condiciones de reembolso que abarcan un plazo de 20 años y un período de gracia de 10 años y medio.

El FMI estableció la RSF en 2022, y para marzo de 2023, cinco programas RSF habían sido aprobados: Bangladesh, Barbados, Costa Rica, Jamaica y Ruanda. Desde entonces, numerosos países han solicitado su participación, incluyendo Níger, Mozambique, Moldavia, Seychelles, Tanzania, Madagascar, Senegal, Benín, Camerún, Paraguay, Cabo Verde, Côte d'Ivoire, Kosovo, Mauritania y Marruecos.

Establecer un RSF podría llevar algún tiempo. Para calificar, Ecuador debe implementar políticas y reformas orientadas a mejorar la resiliencia al cambio climático o lograr objetivos de sostenibilidad, como la transición a energías limpias o la mejora de las redes de protección social. Parece que las consultas entre las autoridades ecuatorianas y el personal del FMI ya han comenzado, centradas en identificar las vulnerabilidades específicas del país, incluidos los impactos del cambio climático, los riesgos ambientales y los desafíos de salud pública. Una vez diseñado el programa, debe ser aprobado por el Directorio Ejecutivo del FMI, que evaluará los compromisos de reforma, la situación fiscal y las políticas macroeconómicas de Ecuador para garantizar que el RSF se adapte a las necesidades del país. Dado el tiempo y el esfuerzo involucrados, Ecuador podría solicitar un RSF en 2025, aunque probablemente solo después de las elecciones presidenciales. (O)