"La Blockchan está cambiando totalmente el negocio inmobiliario. Si tienes un startup de tokenización inmobiliaria, queremos saber de ti ahora", fue la frase que twitteó en mayo de este año Tim Draper, el inversionista en Bitcoin número uno (como persona natural) y famoso inversionista en capital de riesgo de Silicon Valley, como parte de un dedicado esfuerzo por invertir en este espacio. Ya no hay duda, la blockchain revolucionará la industria inmobiliaria.
Los activos inmobiliarios son considerados el principal protector de patrimonio a nivel mundial y están valorados en más de 300 trillones de dólares. Para poner la cifra en perspectiva, la bolsa de valores de Nueva York (la más grande del mundo) tiene una capitalización total de 26 trillones de dólares.
Es decir, los activos inmobiliarios están valorados en más de 11 veces el valor de todas las empresas que transan en la bolsa de Nueva York. Sin embargo, esta clase de activos son, en general, costosos y apenas el 1,3% se transacciona públicamente. Las alternativas para proteger el patrimonio personal en activos inmobiliarios son principalmente poder adquirir un activo completo (departamento, oficina, bodega), en general con un monto de inversión alto, o invertir en fondos inmobiliarios que se transaccionen públicamente y que permitan invertir montos menores que el costo total de un activo. Cualquiera sea el caso, los montos de inversión siguen siendo altos, se requieren varios intermediarios y las inversiones son poco líquidas (lentas de vender), lo cual restringe el acceso a la gran mayoría de las personas.
Por otro lado, la tecnología Blockchain se resume como un sistema de registro de información inmutable y descentralizado.
Si bien la Blockchain comenzó a hacerse conocida principalmente a través de las criptomonedas como Bitcoin o ETH (Ethereum), que con partidarios y detractores, han logrado niveles de adopción y crecimiento históricos. Hoy se estima que ya hay más de 300 millones de usuarios cripto en el mundo y que al menos el 10% de la población mundial habrá utilizado criptomonedas al 2030. En un estudio realizado por Chainanalysis, Argentina se ubica en el 10mo. lugar mundial del Índice de Adopción Cripto 2021 (entre 154 países), mientras que un estudio de Statista reporta a Argentina en el 6to. lugar (entre 54 países) con mayor cantidad de usuarios.
En este sentido, al poder registrar información que no puede ser alterada y que está siempre disponible, (pues no depende de servidores centralizados) permite muchos usos que en última instancia disminuyen intermediarios y cortan costos de transacción en un gran número de operaciones. Justamente, la industria inmobiliaria depende en gran parte de sistemas de empadronamientos que permiten registrar propiedades, obtener créditos, realizar transacciones, formalizar alquileres, entre muchos otros usos. Por esta razón, la blockchain tiene virtualmente infinitas aplicaciones a la industria que, correctamente implementadas, generan soluciones mucho más económicas para las partes y aumentan el acceso a una industria tradicionalmente poco accesible.
¿Cómo la Blockchain está cambiando al negocio inmobiliario?
Una de las principales aplicaciones disponibles permite democratizar el acceso a las inversiones inmobiliarias a través de fraccionar activos inmobiliarios y transarlos 100% de manera digital, con total transparencia, trazabilidad y seguridad. Así, cualquiera puede invertir desde 7.000 pesos en un porcentaje de una propiedad para alquiler, reflejado en participaciones digitales o "tokens" y recibir su proporcional de renta de manera mensual. Además, la participación o "token" se puede vender 100% online y contra sistemas de liquidez que no requieren puntas de compra, convirtiendo bienes inmuebles, tradicionalmente ilíquidos en bienes líquidos.
Otra aplicación que se está desarrollando en EE.UU. incluye digitalizar en blockchain los títulos de propiedad de los inmuebles de manera de facilitar las transacciones de propiedades entre personas. El objetivo es que la transferencia de propiedad, al momento de una venta de un inmueble, pueda hacerse en minutos, cumpliendo con toda la normativa de registro, en vez de semanas, como dura el proceso al día de hoy. Por su parte, el Gobierno de Colombia firmó un acuerdo de colaboración con una firma blockchain para certificar los títulos de propiedad de las tierras rurales, lo que permitiría evitar las falsificaciones y disminuiría drásticamente los tiempos de adjudicación de predios.
Blockchain desata la verdadera economía colaborativa. De esta forma, por ejemplo, será posible que miles de inversionistas del mundo cofinancien un proyecto de plantaciones de soja, un parque de conservación en la Patagonia y hasta el desarrollo de un edificio en la ciudad. Más aún, permitirá a todas las personas, sin importar su capacidad de inversión, su ubicación geográfica o sus contactos, ser parte de la economía inmobiliaria, con todos los beneficios que eso conlleva. Aunque la tecnología y la regulación que esta requiere aún es joven, la promesa de blockchain por revolucionar la industria inmobiliaria es ya una realidad.
*La columna fue escrita por Daniel Pardo, CEO & founder de Wbuild