En diciembre de 2017, tras la publicación de la novela 'Náufragos en Tierra' (Alfaguara), y como consecuencia de las entrevistas que realizara a varios medios de comunicación latinoamericanos el protagonista de la obra César Gómez Hernández, expedicionario del Granma y revolucionario cubano que luchó por la libertad e independencia de su país en contra de la dictadura de Fulgencio Batista, Martí Noticias, agencia informativa de prensa radicada en Miami se comunicó con la editorial para concertar una cita en la que conversarían César Gómez y Carlos Alberto Montaner.
Gómez, que entonces tenía 99 años y gozaba de una lucidez admirable, recordaba muy bien a Montaner, que había sido compañero suyo de exilio en la embajada de Venezuela en La Habana en 1961. Por su parte, el escritor y defensor de la libertad y los derechos humanos, Carlos Alberto Montaner, se había enterado por la prensa de que aquel caballero prematuramente canoso, liberal, independentista y revolucionario que había sido parte de la odisea del Granma y del triunfo de la Revolución cubana, aún estaba vivo y se había convertido en el protagonista de una novela.
Así, con gran emoción, compartimos aquel diciembre de 2017 una entrevista maravillosa entre estos dos personajes que se reconocían después de cincuenta y seis años de haber compartido una habitación en lo que sería el exilio perpetuo de su patria.
Montaner y Gómez compartieron entonces la misma habitación de la enorme residencia del embajador venezolano en La Habana, junto a más de ciento cuarenta personas que en esos meses y años pasaron por aquella legación para intentar salir de Cuba ante el giro repentino que había dado Fidel Castro a una revolución que nació y se forjó en el independentismo, en el liberalismo y en el antiimperialismo, y que en abril de 1961, tras el ataque a Bahía de Cochinos y la ayuda ofrecida por la Unión Soviética, se declaró comunista, marxista y leninista.
Recojo de los archivos de Radio Martí (se la puede escuchar completa en la página de este medio) y de la grabación que hicimos entonces quienes participamos en la curiosa entrevista, los siguientes diálogos fragmentados que mantuvieron estos dos personajes enormes que, en su juventud y a lo largo de su vida, se entregaron por la libertad y la independencia de su Cuba querida:
Carlos Alberto Montaner (CAM): César, soy Carlos Alberto.
César Gómez (CG): ¡Cuánto gusto! Tantos años sin vernos, pero ahora la suerte de poder encontrarte otra vez.
CAM: Sabes que has estado presente en muchas conversaciones que yo tuve con Carlos Varona, quien laboró en el Ministerio de Trabajo a inicios de la revolución… Te quería mucho y hablábamos de ti. Sabía que te habías ido a Colombia…
CG: Yo me quedé del lado de acá, encontré ayuda y acogida en Colombia y me desarrollé y hoy día estoy viviendo hace 56 años en este país.
…
CAM: ¿Tú estuviste en el adiestramiento que tuvieron las personas que desembarcaron en el Granma?
CG: Sí, el primer campamento que se creó fue en las montañas, ahí estuvo el Che, Juan Almeida, el gordo Smith y yo hasta que un día Fidel me ordenó trasladar unas armas desde el DF hacia Mérida, de donde pensábamos que sería la salida de la expedición a Cuba. Allí me detuvieron y la pasé mal, pero finalmente salí en libertad y pude participar del viaje del Granma.
CAM: Sí, lo recuerdo bien. Y, luego de la Revolución ¿qué pasó contigo?
CG: Cuando fuimos puestos en libertad en Isla de Pinos, Armando Hart y yo nos ocupamos del campamento de Columbia, nos hicimos cargo, nos lo entregaron y tratamos de hacer contacto con Fidel. Más tarde fui al Ministerio de Trabajo) con la encomienda de crear grupos obreros adeptos a la revolución porque la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) estaba en manos de los comunistas y a la vez tenían el periódico Hoy y tres ministros colaborando con la dictadura. Entonces mi misión con Manolo era crear dirigentes obreros pertenecientes a la revolución.
…
CAM: Antes de exiliarte, ¿qué fue lo qué pasó contigo? No recuerdo si eso lo hablamos en la embajada…
CG: En el mes de junio de 1959 Raúl (Castro) me citó a una reunión en casa de Yeyé (Haydeé Santamaría) y Armando (Hart) para hablar con viejos revolucionarios y tratar de que nos uniéramos y admitiéramos la unión con el Partido Comunista. Yo me opuse y le dije: 'Raúl, yo no puedo de ninguna manera aceptar que ahora los comunistas sean parte del gobierno, si luchamos contra ellos cuando estaban del lado de Batista… ¿Cómo es posible que se me pida ahora que yo acepte la unidad? Me opuse, me fui y llamé a la gente y les dije: saquemos los papeles del Ministerio porque nos van a sacar, porque mi posición frente a la petición de unidad con los comunistas, ha sido negativa…
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CAM: Me gustaría saber si hubo una coordinación para el asilo entre Manolo, Carlos Varona Duque-Estrada y César Gómez.
CG: Después que estábamos fuera del gobierno, la gente que era parte de los movimientos de resistencia nos fueron a ver en varias ocasiones para tratar de que nos integráramos… Y el día de la invasión a Cochinos, pensábamos: ¿qué hacemos? Estamos en el aire, no pertenecemos a los grupos que están desembarcando, somos contrarios al gobierno, acusados de traidores, entonces estamos en una posición muy difícil.
Nos reunimos allí en un lugar y cuando explotó toda la situación buscamos la única solución que teníamos, que era asilarnos y nos asilamos todos en conjunto, porque estábamos vinculados por la misma situación.
…
La conversación duró aproximadamente cuarenta minutos. Los dos personajes hablaron de aquellos días en los que el destino los juntó brevemente antes de que ambos debieran salir de Cuba para no volver jamás. César Gómez Hernández murió en enero de 2020 con ciento tres años de edad. Carlos Alberto Montaner acaba de fallecer hace pocos días en Madrid.
Durante estos últimos días no he podido dejar de pensar en esos dos hombres enormes que lucharon por la libertad y la independencia de Cuba, que fueron traicionados por los postulados ideológicos interesados y tardíos de Castro y de sus seguidores, y que nunca más volvieron a su patria.
Hoy, si es que se hubieran reunido otra vez (lo que sería una enorme y grata sorpresa para ambos pues ninguno creía en la vida después de la vida), me gustaría pensar que ha empezado otra vez aquella conversación que se retomó en 2017 y por la que habían esperado casi toda una vida en el exilio. (O)