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Tomas de Aquino
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El tomismo es "adaptación" de la filosofía del griego a los intereses religiosos del italiano. En sus intenciones conciliatorias entre la filosofía aristotélica y la teo-filosofía tomista, Aquino interpreta la primera según las finalidades místicas perseguidas y recogidas por la segunda.

11 Diciembre de 2024 15.05

Referimos a la teo-filosofía desarrollada en el siglo XIII por quien en círculos filosóficos, pero más que en ellos en el mundo católico, es conocido como "santo" Tomás de Aquino. Nace en 1225 en Roccasecca, Italia, en el seno de una aristocrática familia. A requerimiento de su padre, inicia estudios en la abadía benedictina de Montecasino, que los continuará en la Universidad de Nápoles. Paréntesis: recordemos que la abadía, fundada en el siglo VI por san Benito de Nursia y titular de un importantísimo patrimonio cultural, fue devastada por bombardeos aliados durante la II Guerra Mundial y la batalla en sus predios.

Las intenciones familiares de que Tomás se uniera a la centenaria Orden de San Benito se vieron frustradas... ante los avances que hicieran sobre el joven prospecto representantes de la novel Orden de los Predicadores, mejor conocida como Orden de Santo Domingo. Los dominicos habían logrado su reconocimiento oficial por la Iglesia católica solo en 1216. Santo Domingo de Guzmán y sus seguidores desde un inicio se hicieron conocer por sus aberrantes prácticas en contra de todo lo que consideraban herejía. El rol de los dominicos fue determinante en la formación y consolidación de la Inquisición. Su mayor representante, T. de Torquemada, fraile dominico, es uno de los más sangrientos personajes de la historia.

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La oposición de la familia fue feroz. Mantuvo al futuro santo secuestrado en un castillo familiar. Relata A. C. Grayling (1949), historiador de la filosofía, que allí Tomás de Aquino fue tentado por una prostituta con intenciones de que abandonará a los dominicos. Ahuyentó a la mesalina con un "atizador al rojo vivo". Con grande imaginación -más bien espejismo, en lo cual la Iglesia católica es artista- sostiene la ficción que la misma noche de la tentación Tomás recibió la visita de dos ángeles para recompensarlo por su reacción ante la meretriz. Afirma también la Iglesia que antes de su deceso, el roccaseccani levitó en una capilla mientras desde el cielo recibía elogios divinos por su obra teológica. Cuentan morbosas leyendas que el cuerpo de Aquino fue "hervido" a su defunción, y partes del cadáver cocido repartidas en abadías e iglesias como reliquias. 

Nos preguntamos por qué la Iglesia católica recurre a disparates como los referidos en el párrafo anterior para apuntalar la fe. Quienes creemos en un Dios "racional" no requerimos de historietas para dar crédito a la existencia de un ser superior en nuestras vidas. La verdad es que la Iglesia es prolífica en la generación de mensajes que dejan boquiabiertos... a los católicos, convencidos del lucimiento de Dios; y a quienes no se dejan persuadir por tonterías, sorprendidos por la "ingenuidad" de los primeros.

Como miembro de la Orden dominica va a París, donde fue alumno de Alberto Magno, filósofo y teólogo alemán, quien también pasó a ser santo en el siglo XX por canonización de Pío XI. Su influencia en Tomás de Aquino fue determinante, en particular a través de las lecciones recibidas en torno a las ciencias y la cultura musulmanas. Dado su tamaño corporal y lo parco en manifestaciones orales, los compañeros apodaron a Tomás "el buey mudo". Alberto, en defensa del filósofo, sostuvo frente el buleo que "este buey dará tales mugidos con su saber que resonarán por el mundo entero". No se equivocó, pues al margen de que compartamos o no sus enunciados filosóficos, sí que son profundos y dignos de estudio por quienes deseen adentrarse en la teología católica. El problema con la religión católica no viene dado, propiamente, por verdaderos analíticos, pero por quienes se consideran eruditos por el solo hecho de recibir "lecciones" de curas de barrio. 

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Entre las obras de Aquino tenemos a "Summa contra Gentiles", que se dice fue redactada -a pedido de san Raimundo de Peñafort- con el propósito de convertirlo en un texto de adoctrinamiento a paganos, judíos y musulmanes compeliéndolos a su conversión al catolicismo. Lo interesante de Summa es que parte de una aproximación "racional", no mística, a los principios y formulaciones de la Iglesia. No apela a pasajes bíblicos, lo cual luego abandonaría para retomar el camino de la fe sin sustento en la razón.

Tomás es un serio estudioso y comentarista de Aristóteles. El tomismo es "adaptación" de la filosofía del griego a los intereses religiosos del italiano. En sus intenciones conciliatorias entre la filosofía aristotélica y la teo-filosofía tomista, Aquino interpreta la primera según las finalidades místicas perseguidas y recogidas por la segunda. Sin embargo, no deja de ser cierto que las bases metafísicas, en lógica y en ética del de Roccasecca, son las mismas del de Estagira. La idea tomista de Dios tiene raíces en la noción aristotélica del alma. (O)

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