Una de las características destacadas en toda la literatura de Arturo Pérez-Reverte (Cartagena, España, 1951) es que nunca repite los temas, salvo que se trate de una trilogía como fue Sabotaje, Eva y Falcó.
El autor de más de 30 novelas y miembro de la Real Academia Española presentó en septiembre su más reciente novela-problema: 'El problema final', Editorial Alfaguara, 2023.
En realidad, es un libro policial o novela negra, pero el autor prefiere definirla como “novela-problema”; se trata de una aproximación al cine de los años cincuenta y sesenta del siglo XX.
Todo sucede en una pequeña isla ficticia del Mar Jónico, de nombre Utakos, ubicada frente a Corfú, adonde llegan nueve turistas que deben refugiarse allí por varios días en un hotel hasta que amaine un temporal que impide la navegación.
Nadie podía salir de la isla, tampoco nadie podía entrar.
Ente los personajes que se reúnen en la isla está nada menos que el actor Ormond (Hopalongo) Basil, que se hizo famoso por la interpretación del papel de Sherlock Holmes, un detective que investigaba los más difíciles sucesos policiales junto con su asistente Watson.
En realidad, el actor de cine y teatro se llamó Basil Rathbone y murió en Nueva York en 1967 cuando tenía 75 años.
Como se recordará, las aventuras de Sherlock Holmes son una colección de cuentos escritos por el británico Arthur Conan Doyle y publicados en 1892.
Arthur Conan Doyle (1859-1930) fue también escritor de novelas históricas, obras de teatro y poeta; llegó a ser el autor más leído en la primera mitad del siglo XX por sus cuentos de Sherlock Holmes.
En la isla Utakos ocurre un suicidio, pero se sospecha que la mujer encontrada pudo ser víctima de un homicidio. La policía de Corfú no podía navegar para llegar a investigar o proceder con el levantamiento del cadáver.
Pero en la isla todos vieron y recordaron a un Basil en su papel de Sherlock Holmes y le delegaron investigar si lo ocurrido en realidad fue un suicidio.
Cumplidos 65 años, el actor no ha perdido su intuición y comienza una prolija investigación.
La novela se vuelve terrorífica cuando aparece otro cadáver y luego un tercero. Los sospechosos son todos los huéspedes del hotel, además de la dueña y tres empleados más.
Al igual que el célebre personaje de Conan Doyle, en la novela aparece el Watson que Sherlock siempre necesitó para desentrañar el misterio; el asistente es el español Paco Foxá, un escritor de novelas policiales baratas, de esas que se venden en las estaciones de ferrocarril.
La novela fue también presentada en Londres, en las cafeterías a las que acudían Holmes y Watson para conversar y sacar conclusiones de sus investigaciones policiales.
El género policial, reconoció Pérez-Reverte en Londres, nunca le fue fácil, por eso este libro se demoró y solo lo terminó cuando cada historia encajó perfectamente para que el lector la aprecie mejor.
“Ya no tengo talento para hacer una novela policial buena”, reconoció. Las ideas de 'El problema final' salieron de profundas lecturas de Conan Doyle y de Agatha Christie (1890-1976), explicó también.
Decíamos en un comienzo que el escritor y periodista nunca repite los temas. Una sola novela acerca de la Guerra Civil de España, una de la revolución mexicana, una historia de esgrima, otra de ajedrez.
Sin embargo, una de sus primeras novelas sobre el capitán Alatriste la dejó cuando supo que ya no llamaban la atención y las ventas habían disminuido. Ahora se declaró dispuesto a concluirla con tres episodios más.
La editorial afirma que Pérez-Reverte cuenta con más de 20 millones de lectores y que la mayoría de sus novelas han sido adaptadas, al teatro, al cine, incluso a algunas plataformas como Netflix, por ejemplo, La reina del sur. (O)
