Después del colapso del sistema sanitario en Ecuador y a escala global por la pandemia, el Omni Hospital fortalece su modelo de gestión basado en la calidad de atención al paciente, en la eficiencia de una red de centros ambulatorios y en la prevención de enfermedades. Llegar al hospital con una dolencia ya es muy preocupante para un paciente y su familiar, por lo tanto, lograr una buena experiencia del usuario es la primera consigna.
Mauricio Navia Arango, gerente general de Omni Hospital, señala que el modelo hospitalario cambió con la pandemia, que dejó muchas enseñanzas no solo en la salud, sino en todos los ámbitos de los negocios. En el Omni Hospital estamos enfocados siempre en el paciente, en honrar la vida. Queremos marcar una diferencia en el servicio y no solo por la práctica médica, sino que la experiencia hospitalaria sea lo más agradable posible; ahí actúan la atención, el servicio en caja, servicios complementarios, alimentación, cómo se trata al paciente y cómo se siente en la institución.
El Omni Hospital enfrenta el cambio cuando cumple 14 años de operación en el país y registra altos niveles de eficiencia hospitalaria, rentabilidad y un plan de negocios que incluye nuevas inversiones. Gracias a nuestros especialistas médicos, personal administrativo y de asistencia, el hospital alcanzó altos índices de excelencia. Mauricio Navia, con una experiencia sólida en manejo de empresas de salud y multinacionales, llegó a la institución en 2014 como gerente financiero administrativo, y en 2018 se dio la transición a la gerencia general.
El reto es continuar siendo un hospital de referencia en el país y en la región, con los mejores especialistas, la infraestructura adecuada y la tecnología de punta. Además, Employer Branding le adjudicó el primer lugar como la mejor marca empleadora de la industria hospitalaria. También se encuentra en un proceso de gestión para la certificación internacional de la Joint Commission International.
En los últimos cinco años la facturación del Omni Hospital alcanzó los US$ 170 millones. Solo en 2022 la cifra fue de US$ 43 millones. Además, en los últimos tres años la inversión en equipamiento e infraestructura ascendió a US$ 5 millones.
Entre las adquisiciones relevantes están un resonador Philips Ingenia de 1.5 Tesla (el costo del equipo ascendió a US$ 1,7 millones). Se adquirieron un mamógrafo Mamomat Inspiration, de Siemens; un microscopio quirúrgico Leica PROvido; equipos de rayos X Luminos Fusion FD; arco en C Genoray Oscar Classic.
Ha sido una trayectoria importante en Guayaquil y el país. Ahora enfrentamos retos como acercarnos más a la comunidad; con la apertura de centros ambulatorios podemos prestar atención en diferentes sitios, queremos tener presencia donde estén los usuarios para evitar desplazamientos largos y que no tengan que trasladarse al hospital, que es de tercer nivel de complejidad, explica Navia.
Actualmente, Omni Hospital cuenta con seis sedes ambulatorias en la ciudad y en cantones aledaños, que se consideran parte del Gran Guayaquil. La sede principal de los centros ambulatorios se ubica en el sector de La Aurora, en el cantón Daule. En ese sitio se presta atención médica, consulta externa, más de 35 especialidades, área de RX y procedimientos menores, densitometría y tomas de laboratorio clínico.
El laboratorio de procesamiento está centralizado en el hospital, pero en las sedes se realizan las tomas médicas para derivarlas al Omni Hospital. Ese sistema ayudó en pandemia, así como el servicio a domicilio, aunque en el inicio registraron errores por la alta demanda, que se fueron corrigiendo luego.
La gente no quiere desplazarse lejos de su casa, vamos a continuar con el objetivo y debemos trabajar todos para que los sistemas sanitarios sean universales, integrales y sostenibles. Y no solo debe ser el sector público, sino que tenemos que trabajar en conjunto el sector público-privado y las universidades para que esos tres conceptos mejoren el modelo sanitario. La universalidad de la salud es un derecho y trabajar en conjunto permitirá la prevención en el primer y segundo nivel de atención, que es donde realmente existen los problemas que tenemos en nuestros países latinoamericanos, no solo Ecuador, señala el gerente general.
Explica que una de las consecuencias cuando no hay planes de prevención en los sistemas de salud es que las personas llegan a la edad de 50 a 60 años con problemas de salud muy complejos y le cuestan muchísimo dinero a cualquier pagador, público o privado. Los índices de morbilidad y los problemas de salud son muy grandes y no hay dinero que alcance.
En este 2023 la proyección del Omni Hospital es crecer con sedes ambulatorias para apoyar a los médicos en el diagnóstico oportuno y con precisión. Navia señala que los médicos cumplen un papel importante en la calidad del servicio, por eso destaca que trabajan 350 profesionales en el staff de especialidades en las dos torres médicas. Los colaboradores del complejo hospitalario suman 567 personas en los servicios asistenciales, médicos residentes y de especialidad, enfermeras y tecnólogos, personal de apoyo y mantenimiento.
El quinto piso, que parte zona administrativa, hace dos años fue remodelado para aumentar camas. También se han realizado remodelaciones en quirófanos, imágenes y hay una remodelación continua. Hemos cambiado un poco el concepto para darle otra cara a los hospitales, que se lo sienta como una fuente de vida. (P)