En línea con su modelo de banca económica, social y ambientalmente responsable, Banco ProCredit ha desembolsado en los últimos 10 años más de US$ 193 millones en créditos para inversiones sostenibles a nivel nacional. Desde la creación de su línea EcoCredit en el 2012, la institución otorgó más de 1.700 créditos, que representan un monto total de US$ 193´188.033.
De acuerdo con el comunicado de prensa de la entidad bancaria, los créditos de eficiencia energética se conceden para la adquisición de maquinaria industrial, calderos, sistemas de enfriamiento e iluminación, y/o electrodomésticos de alta eficiencia, así como vehículos eléctricos, viviendas y construcciones sostenibles y/o bombas de calor. Esto créditos están emarcados en el objetivo de la institución de promover la importancia del cuidado ambiental y la ética empresarial, se ha destinado a proyectos dentro de 3 categorías, principalmente: eficiencia energética, energías renovables, y medidas ambientales.
Katarina Zdraljevic, Jefa de la Unidad de Gestión Ambiental de Banco ProCredit, manifestó que este segmento es el más grande de clientes del banco, representando el 71% del portafolio total, desembolsado en 1.210 créditos. En lo que respecta a energía renovable, ProCredit ha financiado plantas fotovoltaicas y de biogas, biodigestores, y proyectos que usan biomasa, con un total de 43 créditos y un monto que asciende a US$ 7 millones.
En cuanto a otras medidas ambientales, Zdraljevic añade que la institución ha destinado créditos para producción orgánica, reciclaje y economía circular, sistemas para protección de aire, agua o suelo, prevención de erosión, prevención de contaminación, consultorías, auditorías y/o certificaciones sostenibles. Han sido 472 créditos de este rubro en esta primera década, lo que representa más de US$ 48 millones, señala Zdraljevic.
La concentración de estos créditos se encuentra en las ciudades más grandes donde existe una industria de mayor tamaño. El 44% de los créditos verdes han sido para clientes de Quito, y otro 39% para los de Guayaquil, relacionado con el tipo de industrias que existen en estas ciudades, donde la inversión en tecnologías más eficientes es muy común.
Entre los proyectos más emblemáticos financiados a través de la línea EcoCredit está Gasgreen, una planta que usa el metano generado en el relleno sanitario de Quito para producir energía eléctrica. Además, ProCredit ha trabajado de la mano con Bioconversión, una empresa que produce una alternativa para alimentación animal basada en el aprovechamiento de residuos de la agroindustria, convirtiendo residuos orgánicos en proteína y abono.
A propósito del décimo aniversario de EcoCredit, la institución creó la cuenta ProGreen, con la cual los clientes pueden tener la garantía de que sus depósitos están siendo destinados a proyectos verdes. (P)