La previa
El 23 de marzo se viene el debate final. Dientes apretados. Expectativas crecientes. Resultados inciertos. Sorpresas en preparación.
El 23 de marzo se viene el debate final. Dientes apretados. Expectativas crecientes. Resultados inciertos. Sorpresas en preparación.
Todo indica que los miedos dominarán las elecciones. No las ideologías ni las propuestas. Se votaría más para evitar un peligro que para impulsar una idea
Los comentarios sobre la primera vuelta se apagan. Las apuestas apasionadas sobre la segunda se multiplican. "Nada fácil", concluyen desde los dos bandos.
Se cumplió el plazo. Con aplomo o escepticismo votamos. Las incertidumbres se acotan. Al menos temporalmente. Se vienen nuevas tormentas, ácidas, intensas, agresivas.
Un debate maratónico y con pocas luces. La consigna: posicionar o cuidar la imagen. La constante: lugares comunes, supresión de riesgos, cero imaginación.
Se cierra un año y empieza otro. Se quema el pasado y se imaginan futuros. La fiesta termina y los ojos vuelven a abrirse curiosos.
Tiempo de balances, de golpes de pecho, de promesas. Tiempo para exprimir el optimismo con miras al próximo año. Con luz se verá mejor el futuro.
Black Friday... Viernes Negro... un día famoso. Signado por las promociones y las ganancias. Pero también por el estrés y el tráfico infernal.
En la crisis energética, "pasamos por un proceso de luto, desde la sorpresa... ahora estamos en una etapa de adaptación, pero con los ánimos bajos". IPSOS
Donald Trump vuelve a la Casa Blanca. Muchos no caben de alegría y esperan el renacimiento de EU. Otros muchos, se tapan la cara para no ver lo que puede venir.
Él regatea, nosotros regateamos, ellos regatean. La práctica del regateo se filtra a todos los rincones. Muestra beneficios y también peligros.
La palabra "sabotaje" se ha instalado en nuestra cultura. Antes, ni se la nombraba. Hoy aparece y desaparece sin respetar su sentido esencial.
Los incendios nos tienen cercados. Con grandes pérdidas económicas. Y no solo suceden en las montañas. También se prenden en el mundo político. Viejos ardores y nuevos fuegos.
Las revelaciones del caso Plaga ratifican la podredumbre del sistema judicial. La libertad de presos peligrosos admite todas las argucias. Los billetes aceitan las decisiones.
Intoxicación: 17 binomios para las Presidenciales. Débil representatividad, dispersión, mediocridad. Ingobernabilidad asegurada. Candidatos perdedores que ganan.
La situación venezolana se envenena cada vez más. Se cierran las opciones democráticas. Se sostiene la mentira y se incrementa la represión. La negociación parece imposible.
La prepotencia y falta de ética se han impuesto en Venezuela. Si no sucede algo extraordinario, Maduro gobernará hasta el 2.031. Su modelo de gobierno se asemeja cada vez más al totalitarismo que no deja resquicios ni para respirar
Casi siempre hablamos y gobernamos para el país formal, negando realidades informales vitales y extendidas. El negocio del oro ejemplifica esta división.
La gobernabilidad esperada para este momento de transición se esfuma de a poco. La polarización renace con fiereza. El tiempo escaso y el "eleccionismo" lo trastocan todo.